El año pasado, The Economist lanzó un concurso de ensayos para lectores de 16 a 25 años de edad, en un intento por atraer a los lectores más jóvenes. «Estábamos pensando en formas de dinamizar y construir una comunidad en torno a nuestras ideas y, en particular, llegar a los jóvenes», explica el editor senior Kenneth Cukier . «Queríamos que escribieran, que expresaran sus ideas, que reflexionaran seriamente y que fueran tenidos en cuenta como pensadores serios e importantes, que lo son».

Se enviaron más de 1.500 ensayos de más de 60 países de todo el mundo, algunos provenientes de participantes menores de 16 años que no eran elegibles para el premio. «Siempre supimos que teníamos una comunidad relativamente fuerte de lectores muy jóvenes», afirma Cukier. «pero pensaba que recibiríamos la mitad o menos de los trabajos que recibimos. Además pensábamos la elección no nos llevaría mucho tiempo, que en 60 segundos ya podríamos decidir si un ensayo podría ser ganador o no, pero no pudimos hacerlo. Eran todos tan buenos que nos lo pusieron muy difícil”.

Ante esta respuesta, The Economist convoca el concurso por segundo año consecutivo Para Cukier, “lo que está claro es que necesitamos nuevas ideas, y esta es una oportunidad para que los jóvenes de todo el espectro político reflexionen seriamente y expongan lo que creen que el mundo debería hacer «.

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